Registrar un dominio es un proceso rápido, pero no debe tomarse a la ligera. Un dominio no es solo una dirección web, es una parte crucial de la identidad de tu marca.
Ya sea que estés lanzando un blog, mostrando tu portafolio o comenzando una tienda online, el nombre de dominio suele ser lo primero que ven los clientes potenciales, lo que lo convierte en una parte esencial de tu presencia online.
Tomarse el tiempo para elegir el nombre de dominio correcto es fundamental para el éxito a largo plazo. Un dominio bien elegido puede impulsar el reconocimiento de la marca y facilitar que los clientes te encuentren online. Por otro lado, cambiar de dominio después del lanzamiento puede perjudicar tu posicionamiento en los motores de búsqueda y confundir a los clientes.
Esta guía te mostrará cómo registrar un dominio, ofreciendo consejos de expertos para elegir la dirección web perfecta para tu negocio.
Cómo registrar un dominio en seis pasos
1. Elegir un nombre de dominio
Tu nombre de dominio es una parte importante de la identidad de tu marca. Si aún estás en el proceso de nombrar tu negocio, considera el nombre de dominio como parte de esa decisión. Un dominio que coincida con el nombre de tu marca será más fácil de recordar para los clientes.
Si ya tienes un nombre de empresa, tu dominio preferido podría ser TuMarca.com. Pero, ¿qué pasa si ya está en uso? No te preocupes, tienes opciones:
- Usar un sufijo: Diferencia tu dominio agregando una palabra al final. Podría ser tu producto principal (TuMarcaZapatos.com), tu ubicación (TuMarcaEspaña.com) o algo que lo abarque todo (TuMarcaOnline.com).
- Usar un prefijo: Comienza tu dominio con un verbo orientado a la acción que destaque tu producto o servicio (ConsigueTuMarca.com, UsaTuMarca.com, ComeTuMarca.com).
- Probar una extensión de dominio diferente: Si bien .com es el dominio de nivel superior (TLD) más utilizado, existen muchas alternativas. Puedes usar una extensión específica de tu región (como .es, .com.es) o una extensión especializada (como .shop o .store). Ten en cuenta que las extensiones especializadas suelen tener un precio más alto.
Utiliza un generador de nombres de dominio gratuito.
Utiliza un generador de nombres de dominio para buscar nombres de empresas y comprobar la disponibilidad del dominio al instante.
2. Comprobar la disponibilidad del dominio
Comprobar si el nombre de dominio que has elegido está disponible es rápido y sencillo. La mayoría de los servicios de alojamiento web ofrecen herramientas gratuitas de búsqueda de dominios que consultan el sistema de registros llamado WHOIS o RDAP.
Aquí tienes algunas herramientas fiables para comprobar la disponibilidad y el historial de un dominio:
Recuerda que los nombres de dominio son universales. Si un dominio no está disponible en un proveedor, tampoco lo estará en ningún otro. ¿Lo bueno? Estas herramientas suelen sugerir nombres de dominio disponibles similares si tu primera opción ya está en uso.
Es posible que te encuentres con un aviso sobre la intermediación de dominios. Esto significa que el dominio ya está en uso, pero el registrador se ofrece a negociar con el propietario actual en tu nombre. Si bien esta puede ser una forma de obtener tu dominio ideal, conlleva costes adicionales y posibles retrasos. Incluso si el propietario acepta vender, el precio probablemente será mucho más alto que el de registrar un dominio disponible.
Dependiendo de tu presupuesto y de la importancia de ese dominio específico para tu marca, la intermediación puede ser una opción a considerar. Sin embargo, si tienes un presupuesto limitado, explorar variaciones de tu dominio deseado suele ser un enfoque más rentable.
3. Elegir un registrador de dominios
Un registrador de dominios es una empresa que reserva y registra nombres de dominio en tu nombre. Cuando compras un dominio, el registrador añade ese dominio al Sistema de Nombres de Dominio (DNS) por ti.
Aunque hay más de mil registradores acreditados, es recomendable utilizar registradores de dominios conocidos y de confianza. El uso de un registrador popular facilita la búsqueda de información sobre cómo administrar tu dominio y solucionar los problemas que puedan surgir al conectar tu dominio con otros servicios.
Puedes comprar un dominio de varios tipos de empresas:
- Plataformas de creación de sitios web (como Shopify, Squarespace o WordPress)
- Servicios de alojamiento web (como HostGator o Bluehost)
- Registradores de dominios especializados (como GoDaddy o NameCheap)
Muchas empresas ofrecen tanto el registro de dominios como el alojamiento. Esto puede ser conveniente, ya que te permite gestionar todas las necesidades de tu sitio web en un solo lugar. Sin embargo, no estás obligado a utilizar la misma empresa para ambos servicios: puedes comprar un dominio de un proveedor y utilizar otra empresa para el alojamiento si lo deseas.
Los dominios suelen pagarse periódicamente, generalmente anualmente, en lugar de comprarse de una sola vez.
4. Comprar y registrar el dominio
Una vez que hayas elegido un registrador y decidido tu nombre de dominio, estás listo para comprarlo. Veamos el proceso con algunos registradores de dominios populares.
5. Revisar el contrato de dominio
Antes de finalizar la compra de tu dominio, lee detenidamente los términos y condiciones del registrador. El contrato de dominio es un documento legalmente vinculante que establece:
- Quién tiene la propiedad total del dominio
- Los términos de renovación y las tarifas asociadas
- Los costes adicionales por servicios como la restauración del dominio o la protección de la privacidad
- Las condiciones para transferir el dominio a otro proveedor
- Los términos de pago, incluidas las consecuencias de los pagos atrasados
6. Renovar tu dominio
Cuando compras un dominio, lo estás asegurando por un periodo de tiempo fijo, generalmente un año. Aunque algunos proveedores ofrecen plazos más largos (como la opción de 10 años de GoDaddy para los dominios .com), el registro nunca es permanente.
Para mantener la propiedad de tu dominio, tendrás que renovarlo cuando expire tu plazo. La mayoría de los proveedores de dominios ofrecen la renovación automática, que suele ser recomendable. Incluso con la renovación automática activada, los proveedores suelen notificarte cuándo se acerca la fecha de renovación.
Recuerda que si tu información de pago cambia, deberás actualizar tu configuración con el proveedor del dominio para que puedan cobrarte la renovación automática.
Si no renuevas tu dominio, dejará de dirigir a tu sitio web y podría ser comprado por otra persona.