Mucha gente confunde los animales de apoyo emocional (AAE) con los perros de servicio. Los perros de servicio están entrenados para realizar tareas específicas que ayudan a personas con discapacidades, mientras que los AAE brindan consuelo emocional a través de su presencia. La ley regula claramente el acceso de los perros de servicio a lugares públicos, pero no se aplica a los AAE.
Según la Ley de Rehabilitación y la Ley de Estadounidenses con Discapacidades (ADA), solo los perros de servicio pueden ingresar a lugares públicos. Los AAE no tienen este derecho. La emisión de certificados por parte de algunos médicos que permiten el acceso de AAE a lugares públicos no se ajusta a la normativa.
Los AAE no reciben un entrenamiento específico y pueden causar interrupciones en lugares públicos, como hospitales, afectando el trabajo de los perros de servicio auténticos y la seguridad de los demás.
El personal médico, especialmente en centros de atención para veteranos, debe estar capacitado sobre la diferencia entre perros de servicio y AAE. Necesitan comprender la legislación pertinente y orientar a los pacientes correctamente sobre sus derechos y responsabilidades al tener un AAE.
Los perros de servicio pasan por un riguroso entrenamiento para cumplir con altos estándares. Deben realizar tareas específicas para ayudar a personas con discapacidades. Por ejemplo, guiar a personas ciegas, alertar a personas sordas o ayudar en la movilidad de personas con discapacidad motora.
Los veteranos que necesitan un perro de servicio deben investigar las regulaciones y los estándares de entrenamiento. Pueden entrenar a su propio perro o recurrir a organizaciones profesionales de entrenamiento de perros de servicio. La evaluación de las habilidades del perro es esencial para garantizar que cumpla con los requisitos y funcione eficazmente.
Existen fuentes confiables de información sobre perros de servicio y AAE, como la Asociación Internacional de Perros (ADI) y el American Kennel Club (AKC). Los veteranos y el personal médico deben consultar estas fuentes para obtener información precisa y completa. Evite sitios web de «Certificación de perros de servicio» sin reputación, que a menudo son fraudulentos. La certificación de perros de servicio no es obligatoria por ley, a menos que el veterano reciba el perro de servicio a través del Departamento de Asuntos de Veteranos.